martes, 11 de diciembre de 2018

La triste historia de Venezuela en la OPEP

Venezuela siempre fingió como un árbitro y un conciliador de las diferencias árabes dentro de la OPEP. La opinión de Caracas fue siempre respetada en los 58 años de historia de la OPEP. En estos momentos, cuando la OPEP parece estar encaminada a desaparecer, y las tensiones entre sus miembros árabes se encuentran en niveles de alta tensión, Venezuela juega un papel nulo.

Manuel Quevedo sin peso en la OPEP /Foto: @MQuevedoF
Manuel Quevedo sin peso en la OPEP 


La semana pasada el mundo energético recibió una inesperada y sorpresiva noticia. Saad Al-Kaabi,ministro de Energía de Qatar anunció que su país se retiraba de la OPEP luego de permanecer 57 añosformando parte del bloque. Argumentó que su país se dedicará casi exclusivamente al negocio del Gas Líquido o LNG, tal como se le conoce en los mercados.
La OPEP fue fundada en 1960 por Irán, Iraq, Kuwait, Arabia Saudita y Venezuela. Qatar se unió a la Organización en 1961. Este país del Medio Oriente tiene una producción de crudo de 1,5 millones de barriles diarios por lo que los expertos piensan que la salida de la OPEP no ocasionará impactos de relevancia en los precios del petróleo.

Sin embargo el componente político de esta salida puede generar eventos que afectarían la estabilidaden el Medio Oriente.
En junio de 2017, Arabia Saudita acusó al gobierno de Doha de estar financiando grupos terroristas chiitas (pro Iran) en la región por lo que decretó un boicot económico contra Qatar. Ambos paísescomparten frontera. Bahrain, Egipto y los Emiratos Árabes Unidos, aliados religiosos de los sauditas,siguieron los pasos aislando a Qatar.
Las tensiones son de tal nivel que equipos deportivos que lleven la publicidad de Qatar Airways si desean jugar en ciudades como Abu Dhabi , Dubai y EL Cairo, entre otras, deben cambiar de uniformeque lleva el logo de la línea área qatarí.
Igualmente, aquellos que lleven la publicidad de Fly Emiratos deben eliminarla si desean jugar en Doha capital de Qatar.
Esta tensión del eje Qatar-Iran vs. Arabia Saudita y sus aliados había sido controlado por la diplomacia internacional. Pero la salida de Qatar de la OPEP crea de nuevos temores dado que Arabia Saudita es el socio principal del bloque petrolero.
La conferencia 175 concluida el pasado viernes demostró la debilidad de la OPEP y el control casiabsoluto de Arabia Saudita. Sin acuerdo claro se concluyó que el recorte de petróleo será consultado con países no-miembros antes de hacerlo oficial.
Es decir, las decisiones de la OPEP deben llevar el visto bueno de Rusia antes de ejecutarse. Es obvio que Arabia Saudita busca un acuerdo con Rusia para manejar los precios del crudo. La OPEP pareciera por lo tanto tener los días contados.
En la conferencia, a los representantes sauditas y de los Emiratos Arabes se les preguntó con insistenciasobre la salida de Qatar, a lo que contestaban lo mismo que anunció Al-Kaabi: que la salida era puramente por motivos de estrategia económica.
Venezuela siempre fingió como un árbitro y un conciliador de las diferencias árabes dentro de la OPEP.La opinión de Caracas fue siempre respetada en los 58 años de historia de la OPEP. En estos momentos, cuando la OPEP parece estar encaminada a desaparecer, y las tensiones entre sus miembros árabes se encuentran en niveles de alta tensión, Venezuela juega un papel nulo. Y ello se notaba en el hecho de que los medios de comunicación no buscaban a la representación de Caracaspara entrevistarlos sobre el tema Qatar. La opinión de Venezuela dentro de la OPEP es de poco peso.La opinión del ministro Manuel Quevedo no se escucha.
Una producción petrolera en decadencia y ya acercándose a niveles de un millón de barriles diarios, más la debilidad mostrada esta semana pasada en Viena, lleva a esta triste conclusión: Venezuela hoy no figura en el mapa energético mundial.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Envejecer, no significa volverse invisible

  Envejecer, no significa volverse invisible, envejecer es cuando nos cerramos a ideas nuevas y nos aferramos a nuestras viejas creencias, e...