La adenomiosis es un trastorno ginecológico que afecta a cualquier mujer, de cualquier edad que todavía tenga la menstruación, según la Organización Mundial de la Salud una de cada 10 mujeres podría sufrirla.
Este trastorno ocurre cuando las células del revestimiento del útero (endometrio) se incrustan dentro de las fibras musculares de la pared uterina, provocando un fuerte dolor pélvico y sangrado abundante. No hay una explicación de por qué ocurre y no hay manera de prevenirlo.
No siempre aparecen síntomas, así que muchas mujeres pueden padecer esta enfermedad sin saberlo, pero cuando se manifiestan pueden ser increíblemente dolorosos, según reseña BBC News Mundo.
Los dos síntomas más comunes de la adenomiosis son una menstruación abundante y dolorosa, incluso a destiempo, y fuerte dolor pélvico.
Se piensa que la Adenomiosis desaparece después de la menopausia, y es que, en ausencia de hormonas el útero reduce su tamaño y al desaparecer las menstruaciones también desaparecen los síntomas asociados a ellas, sin embargo, la mayoría de las mujeres requieren de reemplazo hormonal después de la menopausia, y en algunas con Adenomiosis latente, suelen volver a manifestárseles con un aumento del tamaño uterino y sangrados anormales.
Muchas mujeres tardan años en la que se las diagnostique con adenomiosis, ya que se suele confundir con otras enfermedades pélvicas.
La adenomiosis puede detectarse mediante una ecografía transvaginal interna o una imagen por resonancia magnética. La píldora anticonceptiva o inyecciones hormonales son algunos de los tratamientos que pueden ser efectivos, pero para algunas mujeres la única solución es la histerectomía, una cirugía para extirpar el útero total o parcialmente.
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