César Sequera Ramos || @CesarSequera11
Carlos Carrasco ha visto cómo la playoffs se la hace esquiva. En 2013, cuando los Indios de Cleveland consiguieron el boleto vía “Comodín”, su efectividad de 6.75 lo dejó fuera del roster. Mientras que en 2016, estando ya establecido en la rotación aborigen, sufrió una lesión en su mano derecha que lo relegó al banquillo.
Será el mismo juego, más gente, pero nada distinto"
Ahora en 2017, cuando los Indios ya están clasificados, se encuentra saludable y se ha consolidado como uno de los mejores abridores de las Grandes Ligas, Carrasco ya siente la adrenalina de debutar en postemporada.
“Estoy realmente emocionado por eso”, comenzó Carrasco su explicación a MLB. “He estado en dos postemporadas; pero ésta es diferente, porque ahora podré lanzar. Será el mismo juego, más gente, pero nada distinto”.
Así definió su enfoque para lanzar el segundo juego de Cleveland en la próxima serie, sin importar el rival que tenga enfrente. “Es el mismo beisbol de siempre”, continuó Carrasco. “Lanzaré de la misma forma que lo hizo en temporada regular”.
Ahí lo hizo bastante bien. Carlos Carrasco cerró 2017 con marca de 18-6, una brillante efectividad de 3.29 y su WHIP de 1.10 demuestran el dominio frente los rivales. Además, por primera vez en su carrera superó las 200 entradas y la barrera de los 200 ponches.
“El año pasado lo extrañamos”, dijo el receptor, Roberto Pérez, que terminó siendo importante en un equipo que se quedó a las puertas de ganar la Serie Mundial sin Carrasco. “Hicimos un buen trabajo, pero agregas un brazo como el que tiene, digo, le da otra opción a Francona. Finalmente está saludable y estoy ansioso por verlo en postemporada”.
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