La cisterna de Pdvsa Gas ya no pasa por los edificios de La Estación, ubicados en la avenida Venezuela con calle 32. Más de 60 días tienen 500 familias esperando el llenado del tanque de gas que antes era surtido cada quincena, al problema se le suma los cortes eléctricos que registra la zona por lapsos de hasta seis horas que tienen con los nervios de punta a las amas de casa del complejo residencial, quienes pasan hambre junto a sus hijos cuando ambos servicios fallan.
"No tenemos cómo cocinar. Mi cocina eléctrica es de una hornilla y tardo hasta cuatro horas para poder hacer tres arepas", relató Rosa Márquez, una señora de la tercera edad que vive en uno de los bloques. Olga Borges, miembro del consejo comunal, indicó que el 50 por ciento de las familias que habitan en La Estación son adultos mayores.
"Hemos discutido hacer fogones en el estacionamiento de los edificios, porque muchas familias no tienen cocina eléctrica, pero los vecinos no terminan de ponerse de acuerdo", comentó. Señaló que se han cansado de enviar cartas a Pdvsa Gas y la empresa justifica la falla argumentando que no tienen el combustible para despachar y presentan fallas en la flota de vehículos de distribución.
Igual para en la urbanización Antonio José de Sucre. Pablo Gamboa, habitante de los edificios, informó que duraron tres meses sin gas, y hace pocos días recibieron la visita del cisterna. "Nos llenó la mitad de los tanques para que nos dure el servicio seis días, tendremos que protestar de nuevo para ver si solucionan el problema", expresó.
Todo un suplicio
Centros comerciales también tienen meses sin gas propano. Luis Suárez, gerente general del Sambil, indicó que en lo que va de año han recibido cuatro despachos, cuando antes semanalmente ese era el promedio de visitas que hacían las cisternas de Pdvsa al centro comercial para llenar mil 200 galones.
El Centro Comercial Las Trinitarias tiene dos meses y medio sin el servicio de gas, según denunciaron sus comerciantes. Laura González, coordinadora de Relaciones Públicas, indicó que casi a diario un representante de la empresa acude a Pdvsa Gas sin recibir respuestas. Locatarios de la feria de las comidas y del paseo gastronómico ahora deben adquirir sus bombonas para no cerrar el negocio.
"Hasta 100 dólares no quitan por una bombona de 43 kilos que nos dura una semana, eso incide en los precios de los alimentos que vendemos", se quejó Javier Arenas en Las Trinitarias, quien ha tenido que recurrir al bachaqueo para no frenar las ventas y cumplir con el pago de salario de sus empleados.
En Babilon tienen tres meses sin gas a granel. "Trabajamos bajo riesgo, con las bombonas de 18 kilos en plena cocina en medio del calor, todo para seguir sobreviviendo a la crisis. Ya han cerrado diez locales de 20 que habían en la feria de las comidas, y si la situación sigue así tomaremos la calle y saldremos a protestar", denunció Delia Heraz, comerciante de un local de comida rápida.
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