El zurdo llegó a ser el mejor abridor de la tropa bostoniana, antes de declinar en las semanas recientes. Ahora se descubre que tenía un quiste en la muñeca izquierda por el que recibirá tratamiento
David Price no estaba sano. Y quizá eso explique el desplome de sus estadísticas. Luego de ser el pilar en la rotación de los Medias Rojas entre abril y mayo, cubriendo el bajo rendimiento del as Chris Sale, perdió el toque y dejó de ser aquel eficaz lanzador. Ahora se encuentra en la lista de lesionados.
El zurdo estadounidense fue sacado este jueves del roster activo de los bostonianos. Una resonancia magnética a la que fue sometido reveló la existencia de un quiste en la muñeca izquierda. De inmediato fue sustituido.
Es una mala noticia. La tropa de Alex Cora tiene 6.24 de efectividad en el último mes y únicamente el venezolano Eduardo Rodríguez ha trabajado con consistencia desde mayo. Pero Price era parte de ese inflado registro. A partir del 19 de julio, mostraba 10.59 de efectividad en sus últimas cuatro presentaciones. Algo andaba mal.
Brian Johnson tomará su puesto como abridor. Es uno de los serpentineros usados en ese rol por Boston este año, cuando surge algo inesperado. De ese grupo ha habido muy poco que rescatar. Le tocará a Johnson dar un paso al frente cuando su equipo más lo necesita.
El mexicano Héctor Velázquez, que también ha sido parte de ese inconstante grupo, fue llamado de Triple A para reemplazar en la nómina a Price. En principio, estará en el bullpen y será relevista intermedio.
No hay mucho más de dónde echar mano. Urge que Rodríguez mantenga el buen paso, que el recién adquirido Andrew Cashner empiece a rendir a la altura de la exigencia y, sobre todo, que Sale y Rick Porcello sumen muchas más presentaciones como las últimas que han hecho, incluyendo la de este jueves.
Price recibió una inyección de cortisona y tratamiento para superar el problema. Los Medias Rojas tendrán que ganar sin él, el tiempo que le tome regresar. Les urge.
El zurdo estadounidense fue sacado este jueves del roster activo de los bostonianos. Una resonancia magnética a la que fue sometido reveló la existencia de un quiste en la muñeca izquierda. De inmediato fue sustituido.
Es una mala noticia. La tropa de Alex Cora tiene 6.24 de efectividad en el último mes y únicamente el venezolano Eduardo Rodríguez ha trabajado con consistencia desde mayo. Pero Price era parte de ese inflado registro. A partir del 19 de julio, mostraba 10.59 de efectividad en sus últimas cuatro presentaciones. Algo andaba mal.
Brian Johnson tomará su puesto como abridor. Es uno de los serpentineros usados en ese rol por Boston este año, cuando surge algo inesperado. De ese grupo ha habido muy poco que rescatar. Le tocará a Johnson dar un paso al frente cuando su equipo más lo necesita.
El mexicano Héctor Velázquez, que también ha sido parte de ese inconstante grupo, fue llamado de Triple A para reemplazar en la nómina a Price. En principio, estará en el bullpen y será relevista intermedio.
No hay mucho más de dónde echar mano. Urge que Rodríguez mantenga el buen paso, que el recién adquirido Andrew Cashner empiece a rendir a la altura de la exigencia y, sobre todo, que Sale y Rick Porcello sumen muchas más presentaciones como las últimas que han hecho, incluyendo la de este jueves.
Price recibió una inyección de cortisona y tratamiento para superar el problema. Los Medias Rojas tendrán que ganar sin él, el tiempo que le tome regresar. Les urge.
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