El bienestar de la mujer es un derecho que se ha ganado a través de diferentes movimientos a lo largo de la historia. En el caso de las mujeres embarazadas, no se pueden escatimar esfuerzos para llevar a término el proceso de nacimiento y lograr que el bebé tenga los mejores antecedentes maternos para impulsar su desarrollo.
La doctora Otilia Perichart Perera, jefa de departamento de Nutrición y Bioprogramación en el Instituto Nacional de Perinatología (INPer), recomienda que desde la concepción o al menos desde el inicio del embarazo se adopten hábitos saludables, ya que todo se transmite a través del cordón umbilical.
Los puntos importantes a revisar son, por ejemplo, un incremento de peso adecuado mensual y proporcional, ya que la obesidad durante el embarazo puede tener repercusiones importantes, una de ellas es la Diabetes Mellitus Gestacional y la Preclamsia y pueden presentarse al mismo tiempo. También hay problemas de crecimiento y pueden darse las dos opciones: la restricción del crecimiento intrauterino o el crecimiento excesivo, esta última se puede traducir en un bebé con 4 kilos con una alta propensión de padecer obesidad en la edad adulta.
La programación metabólica fetal es un proceso que ocurre en el embarazo cuando el cuerpo tiene mayor plasticidad, aquí se recomiendan hábitos saludables y son cambios que deben quedarse de manera permanente. Hay estudios que se han realizado en zonas con registros de hambruna cuyos resultados demuestran que los hijos cuyas madres sufren hambruna son propensos a sufrir obesidad y diabetes.
La consejería que debe aplicarse a las mujeres embarazadas va aplicada a la alimentación saludable con una dieta mediterránea con un consumo base de vegetales, mínimo consumo de alimentos procesados y azúcares, así mismo el médico debe considerar la aplicación o el consumo de multivitamínicos porque esta nutrición tiene repercusiones importantes en el desarrollo del bebé durante el embarazo y en la edad adulta.
Los primeros 1.000 días de la nutrición postnatal es determinante para un desarrollo óptimo y prevención de enfermedades crónicas no transmisibles. Sin embargo, también se recomienda que el ambiente familiar sea adecuado, es decir, que no sea un ambiente obesogénico, todos deben adoptar hábitos saludables para facilitar que los pequeños los adopten en edades tempranas.
Prevenir la obesidad ha sido un tema clave en la salud pública, es por eso que se invita a los médicos a acercarse a las asociaciones para actualizar el tipo de consejería que deben tener con las mujeres embarazadas o en proceso de buscar un embarazo, la World Obesity Federation en conjunto con la Sociedad Mexicana de Obesidad son voceros de la campaña #ROOTS (#Raíces) que proponen atacar la obesidad desde su raíz y brindar soluciones accesibles para cada caso.