En pleno verano, el pasatiempo favorito de cada corredor es quejarse de tener que correr con calor (casi igualado con las quejas del frío que hace en invierno).
Aunque sudes más que el corredor medio - o simplemente te preocupa que pueda ser el caso - correr en verano puede muy angustioso. ¡Las manchas en las axilas! ¡El sabor a sal! ¡La ropa apestosa!
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El sudor no es nada de lo que avergonzarse. ¡Es una señal de conquista! Pero es hora de cambiar tu actitud, colega sudoroso. Aquí tienes 7 razones para transpirar con orgullo.
1 Sudar te refresca
Hay quienes no pueden sudar de modo normal (llamado anhidrosis) y, como tal, eres más propenso a sufrir un golpe de calor y otros problemas relacionados con el calor. Date cuenta de que tu organismo hace lo que se supone que debe hacer y te permite correr de modo seguro en la mayor parte de las situaciones.
2 Todo el mundo se da cuenta de que estás dándole duro
A los corredores les encanta llamar la atención - por eso hay tantos perfiles en redes sociales que detallan cada entrenamiento, cada comida post entreno y cada meta en carrera. ¿Y qué hay mejor que llamar la atención entrenando con todo el cuerpo sudado?
3 Mola ver lo que pesa tu ropa después de entrenar
Nuestro jefe de material, Jeff Dengate, acaba de postear lo que pesa su ropa después de correr. Y pesaban casi 500 gramos más que antes. No tienes que ir tan lejos, pero es satisfactorio notar cómo gana peso hasta tu ropa más ligera después de correr cuando hace calor.
4 ... y el peso que has perdido en forma de agua
Si sales a correr bien hidratado (cosa que deberías), no está mal perder peso en forma de sudor. Pésate, desnudo y seco, antes y después de correr para saber cuánto estás sudando - puede que alucines con la cifra. (Deberías incrementar tu ingesta de fluidos si te encuentras muy sediento o cansado en mitad de carrera, o si tienes dolor de cabeza o la boca seca, todos síntomas de deshidratación media).
5 Al final te acostumbras a tener una barba salada.
Acabas una tirada larga o una competición y piensas: “¿Por qué mi piel tiene esta textura rugosa?” Es la sal. Si sudas mucho por la cara puedes tener las mejillas saladas, un bigote salado, o incluso toda la barba salada, y podrías tenerlo en cualquier otro lugar - bajo tus ropas oscuras, en las cejas o en las pestañas, por ejemplo). ¡Vaya función extraña del cuerpo humano! (también puede ser una amezada para tus mascotas).
6 Tienes una excusa para tomar tu aperitivo salado favorito.
Porque tienes que reponer de algún modo el sodio perdido, ¿verdad?
7 Vas a arrasar este otoño cuando bajen las temperaturas.
Sufrir por el calor tiene su recompensa. Entrenar medio deshidratado - algo difícil de evitar cuando hace calor - puede ayudarte a correr más rápido, sobre todo si compites más fresco.
¿Por qué? Cuando corres con calor tu organismo incremente el volumen de plasma sanguíneo para que te refresques. Cuando ya te has enfriado, ese subidón permanece para seguir llevando oxígeno a los músculos ejercitándose. ¡Preparaos para mejorar vuestras marcas, gente transpirante!