La reina del pop mantiene al tanto a sus seguidores de todo lo que hace durante la cuarentena. Desde videos con bailes improvisados hasta un diario del confinamiento, son muchas de las actividades que la cantante realiza en casa. Y, muchas de ellas, han sido criticadas por sus fanáticos
Madonna, la eterna reina del pop de 61 años de edad, también recurrió a las redes sociales para mostrarle a sus seguidores cómo vive el aislamiento social por el covid-19. La artista ha mantenido al tanto a sus fanáticos de todas sus actividades en su casa. Allí pasa sus días, confinada con sus hijos, los más pequeños: David Banda y Mercy James, de 13 años, y las gemelas Estere y Stella, de 7.
Madonna ha publicado videos en los que se la ve jugando con sus hijos buscando los huevos de Pascua, saltando en las camas o practicando coreografías. A ellos se suma Ahlamalik Williams, la pareja de la cantante desde hace unos meses, al que se ha visto en algunas imágenes.
En las redes sociales Madonna ha mostrado cómo pasa el aislamiento. En su perfil hay videos de velas encendidas durante un largo rato, o materiales en los que monta su propio musical. La artista interpreta canciones inventadas, subiéndose unas medias y poniéndose un parche en el ojo ante las miradas atónitas del personal que tiene a su alrededor. También escribe, y retransmite en videos, una especie de «Diarios de la cuarentena».
Una de las imágenes que más sorprendió a sus fanáticos fue la de ella cantando, en el baño de su casa y con un cepillo de pelo a modo de micrófono, una versión de su clásico tema «Vogue». Además de su interpretación atropellada, la artista cambió adrede la letra. «Pescado frito, oh, pescado frito, ya no queda pasta así que vamos a comer pescado frito», canta en el video. Fue en esa misma bañera en la que grabó un video donde decía que el virus era «un gran igualador». Al final, Madonna acabó borrando el contenido de sus redes.
Un cambio radical
La espontaneidad de la artista es irrefrenable. El columnista de espectáculos Michael Musto ha afirmado que esos videos de Madonna durante el aislamiento le parecen «de lo peor jamás visto». El presentador Howard Stern le preguntó hace unos días a la actriz Rosie O’Donnell por ella. Ambas mantienen una buena amistad, y le cuestionó si no debería «ser honesta» con la artista. O’Donnell afirmó que Madonna «no escucha».
Hay quienes consideran la actitud de la diva como una pérdida de rumbo, un cambio de estilo de vida radical luego de pasar casi una década muy asentada al lado del director de cine Guy Ritchie. La pareja se separó en 2008. Otros aluden que su cambio se originó por la marcha de quien fue su agente durante años, Liz Rosenberg, que se retiró en 2015. «Nadie a su alrededor puede decirle nada hoy día», afirma su coreógrafo durante años, Brad Jeffries, al medio estadounidense Page Six.
«Quizá Liz, pero ya no está. Por eso Madonna parece tan alocada ahora. Defiendo su derecho a salir con chicos de 25 años. Porque si fuera un hombre de 61 con una chica de 25 nadie pestañearía siquiera. Pero el modo en el que lo hace, parece algo desesperado», afirma Jeffries.
Sin embargo, estos días Madonna se ha hecho visible, precisamente, por mantenerse invisible en la escena musical. La cantante no estuvo presente en el concierto One World: Together at Home celebrado el sábado contra el coronavirus.
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