La crueldad de la cuarentena se ceba con Mirtha Legrand, leyenda de la televisión argentina
La gran diva de la televisión argentina, hija de emigrantes españoles, ha perdido a su hermana gemela a los 93 años. Han prohibido a la presentadora ir a velatorio. No se sabe si volverá a la televisión.
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¿Qué se siente cuando a los 93 años muere tu hermana gemela? ¿Qué sucede cuando eres imbatible, casi eterna, pero esa mitad tuya, ese ser entrañable al que amabas más que a ti misma se va en medio de una siesta y sin avisar? ¿Qué sucede cuando no puedes despedirte de ella porque estás en cuarentena y cualquier contacto con el mundo exterior es un riego?
Las respuestas le corresponden a Mirtha Legrand, la gran diva de la televisión argentina, eje de un fenómeno único, el de esas mesas de almuerzos y cenas televisadas a las que cualquier argentino siente como un enorme honor ser invitado. El ciclo comenzó en 1968, como Almorzando con las estrellas, pero enseguida se transformó en Almorzando con Mirtha Legrand. Y 52 años después ahí sigue, aunque su conductora, su alma, está hoy en casa llorando a diario por la muerte de Silvia, de "Goldy", su hermana gemela, su irrepetible mitad. El programa lo presenta hoy su nieta, Juana Viale, y no se sabe si Mirtha volverá.
"Mamá, ¿te gustaría volver al programa?", le preguntó en estos días Marcela Tinayre, su hija, a Mirtha Legrand. "No, por ahora no", fue la respuesta de la afligida Mirtha.
La crisis del coronavirus ofrece a diario historias horrorosas, infinitamente más duras que las de Mirtha Legrand. Goldy no murió de Covid-19, sino durmiendo la siesta, casi dulcemente. Pero tiene su dureza que una mujer de 93 años que conversaba "hasta cinco y seis veces en una hora" con su hermana se entere de la muerte encerrada en su piso, y que cuando diga que quiere despedirse de ella su médico le dé un "no" rotundo.
ORÍGENES ESPAÑOLES
José Martínez era un comerciante de Almería, y Rosa Martínez, una maestra de Santander. Se casaron en los años 20, hace un siglo, en Argentina. El primer hijo fue José, que se convertiría en director de cine. Luego llegaron las gemelas. Sucedió hace 93 años: María Aurelia, cuyo nombre artístico fue Silvia y su apodo Goldy, nació instantes antes que Rosa María Juana, la Chiqui. Las gemelas fueron por años figuras del cine argentino hasta que Silvia Legrand decidió pasar a un segundo plano y dedicarse a su familia. Todo el terreno abierto para que Rosa María Juana se consagrara como Mirtha Legrand y desarrollara una carrera fulgurante.
Héctor Vidal Rivas, asesor de imagen y gran amigo de la diva, intentó explicar en estos días lo que representaba Goldy para Mirtha, que habló con su hermana antes de esa siesta de la que jamás se despertaría. "El hecho de no poder despedir a la hermana... El doctor no la dejó bajo ningún punto de vista. Ella se está cuidando tremendamente, el único contacto que tuvo en estos días es con Elvira, su asistente, no entra nadie a la casa. Esta temerosa con todo lo que está pasando. Y Goldy murió de tristeza, porque nunca pudo superar la muerte de José, eso fue muy difícil".
Con José, Vidal Rivas se refiere al hermano mayor de Mirtha Legrand. El golpe de su muerte en 2019 fue para Mirtha tan fuerte como el que sufrió en 1994 cuando murió su esposo, Daniel Tinayre, que era también el productor de sus almuerzos. Se pensó que el programa se había acabado, pero un productor teatral, Carlos Rottemberg, gran amigo de la diva, tomó las riendas del ciclo. Cinco años después, cuando murió Daniel, hijo de Mirtha, los almuerzos dejaron de emitirse por unos meses.
Goldy murió el 1 de mayo. Al día siguiente, en la noche del sábado, la mesa de invitados de Mirtha estuvo a cargo de Juana, su nieta, una figura ampliamente conocida en el país. Vestida de negro, Juanita Viale habló con emotividad.
"Como ya todos saben ayer murió mi tía abuela, la hermana gemela de la señora Mirtha Legrand. Murió Goldy. Uno se va preparando para llevar adelante este programa, pero nunca se puede aprender a transmitir este tipo de noticias, más cuando es una persona de mi familia", dijo al sentarse en el escritorio de su abuela, adornado con un portarretrato en donde se podía ver una foto de las hermanas sonriendo.
"Goldy fue una actriz de la época de oro de la Argentina, hizo grandes películas junto a su hermana. Una mujer con mucha memoria, muy sensible, muy familiera. Yo le voy a mandar un beso muy grande a sus hijas, a sus nietos, a sus bisnietos, y a toda esta pequeña familia que somos los que vamos a despedirla en esta situación tan particular como es la pandemia", añadió.
Rottemberg dio detalles de cómo Mirtha Legrand se enteró de la muerte de su hermana: "Me sonó el teléfono y era Mirtha para contarme que había fallecido Goldy, que se lo había avisado recién su hija Marcela y me pidió que fuera a su casa. Yo vivo a una cuadra, así que en cuestión de minutos estuve ahí. Dentro del departamento todos nos comportamos muy responsablemente y nos mantuvimos a unos cinco metros de distancia, para respetar las medidas de prevención por el Covid-19. Tuvimos una charla lejana pero muy amena, estábamos todos con barbijo (mascarilla). Mirtha estaba muy dolorida, por supuesto, pero con la fuerza intacta".
Dentro de la tristeza hubo también tensión, porque Mirtha quería ir al funeral de su hermana, relató Rottemberg. "Se generó un intercambio, que no llegó a discusión, porque Mirtha quería estar presente en el sepelio de su hermana. De alguna manera, creo que ella me convocó porque estaba segura de que, con todo el dolor de mi alma, yo iba a aconsejarle que no lo hiciera. Le explicamos lo importante que es que se cuide, y en un momento, sin que ella se diera cuenta, llamé a su médico personal, Guillermo Semeniuk, que la convenció".
"Me fui del departamento horas más tarde, con una pequeña satisfacción: la de haberle sacado una sonrisa a Mirtha al evocar la frase que muchas veces ella me pide que le diga: 'Los argentinos nos tenemos que plantear qué país le vamos a dejar a Mirtha Legrand'".
La frase le saca también sonrisas a los argentinos, que suelen bromear con la inmortalidad de la diva. ¿Regresará a la televisión? Tiempo al tiempo, está golpeada. Hay que escuchar a Marcela, su hija: "Ella tiene que recomponerse como tenemos que recomponernos todos. Esto ha sido muy fuerte, y el coronavirus también te quema un poco la cabeza. Eso y perder a un ser tan querido... la simbiosis que había entre estas dos gemelas por ahí muchos no lo entienden, pero nosotros la vivimos".
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