Este 22 de noviembre se cumplen 57 años del asesinato del presidente John F. Kennedy. Pero dicha familia ha enfrentado numerosas tragedias, alimentando la idea de que el clan más famoso de Estados Unidos vive una horrenda maldición.
¿Cómo explicar si no que “cada vez que un Kennedy está por alcanzar un objetivo o una ambición, es condenado a pagar un elevado precio?”, se preguntó Edward Klein en su libro “La Maldición de los Kennedy”.
Y dicha teoría o maldición pareciera estar respaldada por los hechos reales. “Hay que remontarse a la Grecia antigua, a los Atreides, a figuras legendarias como Agamenón, Clitemnestra, Orestes y Electra, para encontrar una familia sometida a semejante serie de calamidades”, escribió el mismo autor.
Desde el asesinato del presidente John F. Kennedy hace 57 años, el clan debió enfrentar el también homicidio de su hermano Bobby en 1968, la muerte por sobredosis de drogas de David en 1984, hijo de Bobby, la muerte en un accidente de ski de Michael, otro hijo de Bobby, en 1997.
Uno de los últimos dramas hasta ahora ha sido el suicidio de Mary Richardson Kennedy, la segunda esposa de Bobby Junior, en mayo de 2012.
Pero fue la muerte de John John, el hijo de JFK y Jackie Kennedy, al accidentarse la avioneta que él mismo piloteaba el 16 de julio de 1999, lo que conformó al mito de la maldición.
En la primera mitad del siglo XX, Joseph P. Kennedy y Rose Elizabeth Fitzgerald procrearon a nueve hijos que destacaron en la política y el entretenimiento, pero todos ellos sufrieron a causa de su apellido.
A continuación, hacemos un recuento de las principales tragedias que han marcado al clan Kennedy, y que han alimentado el mito de la maldición sobre esta familia:
Joseph
El hijo mayor de los Kennedy nació un 25 de julio de 1915, se enlistó en la Marina de los EE.UU. y se convirtió en aviador naval y piloto de bombarderos en la Segunda Guerra Mundial. Logró comprometerse con la actriz Athalia Ponsell (asesinada en 1974 a machetazos por un vecino), pero su boda no se realizó tras la trágica muerte de “Joe”, quien murió el 12 de agosto de 1944, a los 29 años, tras una explosión accidental en el avión que tripulaba.
John (JFK)
El 29 de mayo de 1917 nació el trigésimo quinto presidente de los EE.UU., quien fue alcanzado por la maldición Kennedy y esta se extendió hasta su esposa e hijos.
El 12 de septiembre de 1953, JFK se casó con Jacqueline Onassis, tres años después ella daría a luz a una hija muerta, y diez años después el hecho se repetiría, su bebé Patrick falleció a los dos días de nacido. A tres meses de la pérdida, John fue asesinado frente al mundo un 22 de noviembre de 1963, a sus 46 años. Fueron tres disparos los que le arrebataron la vida, mientras recorría las calles de Dallas, Texas, junto a su esposa. Jacqueline no tuvo una muerte tranquila, falleció a causa de cáncer de linfoma a los 64 años. Dos hijos seguían con vida, Caroline y John Jr., hasta que este último falleció al estrellarse el avión que piloteaba en 1999. Caroline Kennedy hoy tiene 60 años.
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Rosemary
El 13 de septiembre de 1918 llegaría la primera niña a la familia. Su belleza y alegría eras abrumadoras, pero se vieron opacadas a sus 23 años. Desde niña fue tratada por un leve retraso mental, y su padre, Joseph, no quería que su estado afectara la carrera de sus hermanos y ordenó la lobotomía, esta salió mal y su mente quedó como la de una niña de dos años. Los padres la ocultarían, hasta que en 1961 Onassis hizo la revelación a sus hijos. Rosemary murió de causas naturales en 2005.
Kathleen
Sólo vivió por 28 años, y varios de ellos sufriendo el rechazo de su familia. Nació un 20 de febrero de 1920, “Kick”, como la llamaban, tenía un alma rebelde, y se vio perdidamente enamorada de William Cavendish. Por ser anglicano y ella católica, los Kennedy no lo aceptaban; pero Kathleen se casó con él en mayo de 1944, cuatro meses después él muere en la Segunda Guerra Mundial. “Kick” volvió a encontrar el amor en Peter Wentworth-Fitzwilliam, aunque antes de casarse ambos murieron en un accidente aéreo.
Eunice
La quinta integrante del clan es una de las que corrió con más “suerte”, según los seguidores de la familia. Eunice se sumergió de lleno en la política desde muy joven, y en sus últimos años de vida se convirtió en una de las Kennedy más longevas. Nació el 10 de julio de 1921, y a inicios de los 50 se casó con Robert Shriver, un diplomático con quien engendró a Maria Shriver, exesposa del actor Arnold Schwarzenegger. Eunice murió a los 88 años, en 2009, debido a un derrame cerebral.
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Patricia
El 6 de mayo de 1924 nacería una de las primeras chicas mejor conocidas como “socialités”, ella llevó Hollywood a los Kennedy y viceversa. El mundo del espectáculo la seducía, quería ser productora y directora, pero no lo logró. En esas conoció al famoso actor Peter Lawford y terminó casándose con él en 1954, pero al ingresar él al “Rat Pack” su relación se arruinó. “Pat” tenía fuertes problemas de alcohol, pero trató de superarlo firmando su divorcio en 1966. Murió en el 2006 por neumonía, no logró superarla por su cáncer.
Robert
La desdicha interrumpió su vida para siempre, sólo vivió 42 años y cayó en manos de la maldición Kennedy. Nació el 20 de noviembre de 1925, para 1950 estaba casado con Ethel Skakel y procrearon 11 hijos. La mala suerte no paró con su asesinato en 1968 tras ganar las primarias en California: en 1973 su hijo mayor dejó paralítica a su cuñada; en 1984 su hijo David murió por una sobredosis de cocaína; en 1997 su sexto hijo falleció en un accidente en Aspen; y en 2012 una de sus nueras fue encontrada muerta en su casa, se suicidó.
Jean
La octava hija del clan también ha sido víctima de su apellido, Jean nació el 20 de febrero de 1928 y se casó en 1956 con Stephen Smith, quien murió de cáncer de pulmón en 1990. Meses después de enviudar, Jean Ann tuvo que lidiar con los problemas de su hijo William, quien fue acusado de violación, pero lograron salir a flote. Ella falleció el 17 de junio de 2020.
Edward
El 22 de febrero de 1932 nació el último de los Kennedy Fitzgerald. “Ted” no logró librarse de la legendaria maldición, en 1964 sufrió uno de los tantos accidentes aéreos que persiguen a la familia, en el incidente falleció uno de sus asistentes y el piloto. A pesar de ser un político activo, desvaneció al enterarse que tenía cáncer de cerebro, el cual le dejó sin vida el 25 de agosto de 2009. Pero no terminó ahí, el 16 de septiembre de 2011 su hija Kara Anne falleció a la temprana edad, a los 51 años, por un ataque al corazón.
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