POR RICK WARREN — DICIEMBRE 9, 2022
“Pero, cuando se manifestaron la bondad y el amor de Dios nuestro Salvador, él nos salvó, no por nuestras propias obras de justicia, sino por su misericordia. Nos salvó mediante el lavamiento de la regeneración y de la renovación por el Espíritu Santo”. Tito 3:4-5 (NVI)
No importa por lo que estés pasando, puedes vivir con esperanza. Esas son las buenas noticias consistentes de la Biblia.
En 1 Pedro 1, puedes encontrar cinco razones para vivir con esperanza. En el devocional de ayer, analizamos la primera razón: Dios te eligió a ti antes de que tú lo eligieras a Él.
Hoy veremos la segunda razón: Dios siempre te trata con gracia y misericordia.
Pedro escribió a los que ya eran creyentes: “¡Alabado sea Dios, Padre de nuestro Señor Jesucristo! Por su gran misericordia, nos ha hecho nacer de nuevo mediante la resurrección de Jesucristo, para que tengamos una esperanza viva” 1 Pedro 1:3 (NVI).
Pedro no solo dijo que Dios es misericordioso. Pedro alabó a Dios por su “gran misericordia”.
Cuanto más entiendas la misericordia y la gracia de Dios, más te asombrarás, como Pedro. Es completamente inmerecido. Es totalmente inmerecido. No es algo por lo que puedas ganar o trabajar. Es solo un regalo gratis.
La misericordia de Dios se basa en su amor por ti. Y no puedes hacer que Dios te ame más de lo que te ama ahora mismo. Tampoco puedes hacer que te ame menos. Eso significa que su misericordia hacia ti nunca cambiará.
La Palabra de Dios, la Biblia, dice: “Pero, cuando se manifestaron la bondad y el amor de Dios nuestro Salvador, él nos salvó, no por nuestras propias obras de justicia, sino por su misericordia. Nos salvó mediante el lavamiento de la regeneración y de la renovación por el Espíritu Santo” Tito 3:4-5 (NVI).
Esto es extremadamente importante de entender. Cuando cometes errores como creyente, Dios no se enoja contigo. Dios no quiere vengarse de ti. Dios no comienza a planear arruinar tu vida.
Esto es lo que Dios hace: Él siempre actúa con misericordia hacia ti. ¿Por qué? Porque estás cubierto con la sangre de Jesucristo cuando lo has aceptado como Salvador.
Gracias a Jesús, Dios responde con misericordia cada vez que te equivocas. Y eso puede darte esperanza.
Reflexiona Sobre Esto:
- Es difícil para muchas personas aceptar la gracia y la misericordia de Dios. ¿Por qué crees que esto es así?
- A menudo escuchas sobre el amor incondicional de Dios. Pero ¿cómo te hace sentir saber que la misericordia de Dios también es incondicional?
- ¿Qué persona en tu vida necesita escuchar acerca de la gracia y la misericordia de Dios? ¿Cómo puedes compartir ese mensaje con ellos esta semana?
Si todavía no has confiado en Jesús y no te has comprometido a seguirlo, ¿por qué esperar más? Si estás listo para cruzar esa línea y tomar la decisión de creer en Jesucristo y seguirlo; haz esta oración.
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