La mucosidad.......... Enfermedad

✅La prueba de la actividad formadora de moco a través del sistema respiratorio es muy poco fiable porque el sistema respiratorio producirá moco con algunos alimentos formadores de moco y con otros no, y algunas veces sí y otras no. La gente nunca piensa en buscar evidencia de moco en sus heces porque, en la mayoría de los casos, ni siquiera saben lo que es no tener moco presente allí.

La persona que quiere probar la validez de la teoría del moco debe primero purificar su dieta hasta que descubra qué es una hez no mucoidea. En este punto, se puede entonces comprobar la actividad formadora de moco de lo que se conoce como alimentos formadores de moco.

El moco es una secreción normal del cuerpo. Todas las membranas mucosas secretan continuamente moco como medio de mantener las superficies húmedas y lubricadas. La ingestión de cualquier alimento, o incluso agua, dará lugar a un mayor nivel en la parte posterior de la boca de un tipo de moco sano, lubricante.

Estos hechos se presentan a menudo para refutar la validez de la teoría del moco. Sin embargo, es fácil distinguir el moco sano del moco formado como reacción a la toxicidad. El moco sano es claro y resbaladizo. El moco malsano es turbio, espeso y pegajoso, y este es el tipo de moco producido por los alimentos formadores de moco.

La dificultad encontrada aquí entre defensores y detractores de la teoría del moco está en el área de la comunicación y de la terminología. Algunos defensores de la teoría del moco prefieren usar la palabra "productores de catarro" en lugar de "productores de moco" porque "catarro" se refiere a una inflamación de una membrana mucosa, y claramente apunta a una condición malsana.

Tal vez haya sabiduría en esto porque todos los alimentos, e incluso el agua, producen moco del tipo saludable. La mayoría de los defensores de la teoría del moco consideran que el tipo sano de moco no es moco en absoluto, sino simplemente un fluido corporal normal.

Por un lado, los detractores de la teoría del moco han definido el moco como cualquier secreción de la membrana mucosa, mientras que, por otro lado, los defensores han definido implícitamente el moco como una secreción mórbida de la membrana mucosa.

En cualquier caso, lo importante es saber que el tipo sano de moco no llama la atención sobre sí mismo. Probablemente hay algo de moco del tipo sano en lo que el autor ha denominado unas heces no mucoides, pero es completamente no pegajoso y discreto.

Siempre que haya moco visible en el sistema respiratorio, o cuando haya heces mucoides discerniblemente presentes, puede estar seguro de que el moco fue producido como resultado de la presencia de toxicidad.

A menudo, los defensores de la teoría del moco se referirán a los tejidos del cuerpo como saturados de moco, al moco que está presente en la linfa, etc. Estas expresiones son bien entendidas por casi cualquier persona que habla inglés como su lengua materna.

Sin embargo, de acuerdo con la definición científica moderna, el moco es una secreción de la membrana mucosa. Debido a que no hay tejido de la membrana mucosa en la mayoría de los músculos del cuerpo o en el sistema linfático, no podría haber ningún moco allí.

Muchos usos de la palabra "moco" que son correctos en el lenguaje común serán contradictorios o incorrectos según el significado de la palabra como un término científico preciso.

Aun así, debemos recordar que la palabra "moco" era parte del idioma inglés con su uso común existente, mucho antes de que se establecieran las convenciones científicas modernas. El "moco" se originó como una palabra latina que fue absorbida más adelante en el idioma inglés.

Hay una enfermedad que la ciencia médica llama "mixedema". En esta enfermedad, el cuerpo se hincha con una solución de lo que los bioquímicos identifican como mucopolisacáridos. La palabra "mixedema" se deriva de las raíces griegas "myxa", que significaMoco, y "oidema", lo que significa una hinchazón. Así, literalmente, "mixedema" significa una hinchazón con moco. Pero decir que en el mixedema el cuerpo se hincha con el moco es científicamente incorrecto, porque los mucopolisacáridos no son moco.

El autor no cuestiona la necesidad de definiciones precisas en un campo exigente como la bioquímica. Hay miríadas de sustancias presentes en el cuerpo. Con el fin de desentrañar el complejo funcionamiento e interacción de estas sustancias, es esencial ser preciso cuando se utiliza la terminología.

Mi único pesar es que la palabra "moco" llegó a ser definida de una manera que está a menudo en desacuerdo con su uso tradicional. En un libro como este, el autor no está tratando de comunicarse con los bioquímicos y otros científicos de la vida. El objetivo aquí es comunicar a la persona común lo que él o ella necesita saber sobre el cuidado apropiado de la salud.

Usar una terminología técnica precisa en tal discusión sólo abrumaría a la persona promedio y derrotaría el propósito de lo que se está diciendo.