martes, 29 de noviembre de 2016

Kim Kardashian ante la batalla más fuerte de su vida

La socialité da su apoyo a su pareja en momentos difíciles.


Kimm Kardashian enfrenta, quizá, su batalla más difícil. La socialité de 36 años tiene que seguir haciendo frente a las secuelas que le dejó el asalto a mano armada en octubre pasado y además, sacar adelante a su esposo, el rapero Kanye West, quien está internado en el Centro Médico de UCLA en Los Ángeles.
Kim ama al rapero Kanye West. Foto: Twitter
De acuerdo a información publicada por el  portal TMZ, la prioridad de ella en este momento es darle todo el apoyo a su pareja para que se recupere de la situación por la que atravieza.

Un informante describió a Kim como una esposa devota y entregada y aseguró que Kanye es un hombre afortunado.
Siempre que pueden están juntos. Foto: Twitter
"Kim está jugando un papel fundamental en todo este proceso, no se ha separado de su lado en todos estos días y le ha hecho entender finalmente que no podía seguir por este camino. Duerme con él todas las noches y también se ha dedicado a alimentarle ella misma para que recupere fuerzas”, contó otra fuente a la revista US Weekly.
En tanto, se sabe que la familia de Kim está pendiente de los dos hijos de la pareja y no los han enterado del estado de salud en el que se encuentra su papá, pues no quieren preocuparlos.
"North y Saint creen que su padre está fuera de viaje, no han querido decirles la verdad porque se acabarían preocupando mucho. Kanye está convencido de que se curará muy pronto y esa fuerza de voluntad jugará un papel esencial en su recuperación", explicó otro informante.
 
Una foto publicada por Kim Kardashian West (@kimkardashian) el 
Kanye West, de 39 años de edad, fue ingresado en un hospital de Los Ángeles con un cuadro grave de trastorno del sueño y deshidratación.
 Los últimos reportes señalan que Kanye lleva tiempo luchando contra paranoia y depresión.


No hay comentarios:

Publicar un comentario

Una oración impactante

Patagonia. Fotografía por Charles F. Stanley.   Sabemos que nuestras peticiones se alinean con la voluntad de Dios cuando provienen directam...