Este 3 de diciembre se conmemora a San Francisco Javier, presbítero jesuita reconocida por la Iglesia por su labor como misionero
El santoral católico conmemora en el día de hoy, 3 de diciembre, al misionero jesuita San Francisco Javier, un religioso español que fue canonizado por el papa Gregorio XVI en el año 1622 junto a San Ignacio de Loyola, Santa Teresa de Jesús, San Isidro Labrador y San Felipe Neri. Nacido en el seno de una familia navarra pudiente, ya que su padre era profesor de derecho y especialista en negociaciones políticas y su madre formaba parte de la aristocracia, Francisco Javier se marchó a estudiar a París a la edad de 20 años, graduándose en Letras y licenciándose en Filosofía.
El contacto con otros estudiantes y hombres de fe en la capital francesa hace que el santo decida emprender el camino eclesiástico con el fin de alcanzar la santidad algún día. En esa vocación tuvo mucho que ver, sobre todo, el fundador de la Compañía de Jesús, San Ignacio de Loyola. Antes de ser ordenado sacerdote, se forma en Montmarte, París, y en Roma, donde trabaja como secretario a las órdenes de su maestro.
Tiempo después pasa un año en Portugal como parte de un viaje promovido por el papa Paulo III (1468 - 1549) para que el rey de Portugal de aquella época, don Juan III, expandiese sus posesiones a los actuales países de Brasil, La India o la isla de Sri Lanka. Es conocido como el "Apóstol de las Indias", de acuerdo con lo que dicta la tradición católica, por todas las misiones que emprende en estos países y en territorios próximos, donde va predicando la palabra del Señor y visitando las distintas comunidades de la zona para compartir sus conocimientos.
Fue el primer misionero patrio que pisó Japón, cuando en 1549 aterriza en la ciudad de Kagoshima, en la isla de Kyushu, para trasladar hasta estas tierras sus postulados sobre el cristianismo. En este lugar pasó otro año de su vida y en ese tiempo consiguió fundar una prolífica comunidad cristiana.
Le llegó la muerte cuando viajaba hacia China, concretamente a la isla de Shanghuan, situada frente a la costa del sur de China. Lo que ha quedado registrado de la vida de este santo, gracias al cual en el día de hoy todos aquellos que se llamen Francisco Javier, Javier o Javiera pueden celebrar su santo, apunta a que la noticia de su muerte no se habría conocido en Roma hasta tres años después.
Además de honrar a San Francisco Javier, cuyo nombre comparten casi 600.000 personas (contando todos los nombres antes mencionados), cada 3 de diciembre también se rinde tributo a otras figuras importantes de la Iglesia católica, canonizadas o beatificadas. Esta es la lista completa:
- San Ambico
- San Birino
- San Casiano de Tánger
- San Claudio tribuno
- San Crispino mártir
- San Galgano
- San Jasón
- San Lucio eremita
- San Mirocles
- San Sofonías
- Santa Atalia
- Santa Hilaria
- Santa Magina
- Beato Eduardo Coleman
- Beato Juan Nepomuceno De Tschiderer
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