jueves, 3 de agosto de 2023

Bendecir a nuestros enemigos

 


Cuando optamos por amar y orar por quienes no lo merecen, somos transformados.

Lucas 6.27, 28

En su famoso Sermón del monte, Cristo nos dice que amemos a nuestros enemigos y los tratemos bien. Tanto el registro de Mateo como el de Lucas indican que cuando el Señor lo dijo, utilizó una forma de la palabra griega ágape que se refiere al amor incondicional. Este amor no es un afecto superficial o un sentimiento de buena voluntad, y no se basa en la naturaleza o el aspecto de la otra persona. Ágape es la clase de amor más profundo que podemos mostrar.

En un principio, utilizar esta palabra griega con respecto a los enemigos parece ilógico, pero en realidad es la solución perfecta: el ágape surge de nuestra voluntad. Cuando elegimos amar, nuestras emociones siguen la decisión de nuestra mente.

Por ejemplo, al orar por nuestros enemigos, nuestro corazón cambia, no de inmediato, sino con el tiempo. Y cuando le pedimos a Dios que nos ayude a expresarle a nuestros enemigos el amor genuino de Cristo, también somos transformados. Ese es el tipo de oración que Dios se complace en responder.

Una reacción llena de resentimiento solo producirá negatividad, pero una reacción misericordiosa puede tener consecuencias profundas. Dios tiene un plan de redención para cada persona, y nosotros tenemos la oportunidad de participar en ese plan cuando mostramos el amor ágape, el amor incondicional del Señor.

Biblia en un año: Isaías 46-49

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Bukowski.......Un poeta?

Alguien escribió... Charles Bukowski era un alcohólico, un mujeriego, un jugador crónico, un patán, un tacaño, un vago, y en sus peores días...