¿Por qué es importante orar por los difuntos según la Biblia?

Los fallecidos pueden llegar al reino de los cielos con ayuda de las personas que continúan en el plano terrenal 

 Estas palabras ayudarán a que la persona fallecida alcance el reino de los cielos

La iglesia católica ha designado el día 2 de noviembre como el indicado para pedir por aquellas personas que han partido del mundo terrenal y hasta el momento, se cree que no han llegado al cielo. Para estos casos existen algunas oraciones específicas que permiten que se honre a la persona que perdió la vida y a pesar de que su recuerdo siga vigente, pueda descansar en paz.

Según afirman algunos creyentes de religiones como el catolicismo y el cristianismo, luego de que una persona muere, ya no tiene la capacidad de hacer ninguna acción para llegar al cielo, pues su misión en la tierra terminó y no cumplió con los mandatos que tenía estipulados.

Sin embargo, también se dice que personas en la tierra, pueden interceder por los que se encuentran en el limbo, a través de oraciones, salmos y rezos, que les permitan trascender y llegar por fin al reino de los cielos. Estas palabras ayudarán a que los fallecidos sean perdonados por los pecados que cometieron en su paso por la vida y logren alcanzar la gloria de Dios.

Las oraciones que los vivos hacen por los muertos, ayudan a que, las personas que se fueron del plano terrenal, pero que son fieles a Dios y quieren descansar a su lado, puedan salir del espacio en que quedaron atrapados y logren alcanzar la vida eterna.

Oración por el alma de los difuntos

Dios de misericordia y amor, ponemos en tus manos amorosas a nuestros hermanos y hermanas que has llamado de esta vida a tu presencia. En esta vida les demostraste tu gran amor, y ahora que ya están libres de toda preocupación concédeles pasar con seguridad las puertas de la muerte y gozar de la luz y la paz eterna.

Habiendo terminado su vida terrena recíbelos en el paraíso, en donde ya no habrá tristeza ni dolor, sino únicamente felicidad y alegría con Jesús, tu Hijo, y con el Espíritu Santo, para siempre. Amén.

Oración por un ser fallecido

“Padre santo, Dios eterno y Todopoderoso, te pedimos por (el nombre del difunto), que llamaste de este mundo. Dale la felicidad, la luz y la paz. Que él, habiendo pasado por la muerte, participe con los santos de la luz eterna, como le prometiste a Abraham y a su descendencia.

Que su alma no sufra más, y te dignes a resucitarlo con los santos el día de la resurrección y la recompensa. Perdónale sus pecados, para que alcance junto a ti la vida inmortal en el reino eterno. Por Jesucristo, Tu Hijo, en la unidad del Espíritu Santo. Amén.”

Oración por un difunto

¡Oh Dios! Nuestro creador y redentor, con tu poder Cristo conquistó la muerte y volvió a ti glorioso. Que todos tus hijos que nos han precedido en la fe, participen de su victoria y disfruten para siempre de la visión de tu gloria donde Cristo vive y reina contigo y el Espíritu Santo, Dios, por los siglos de los siglos. Amén.

ales, Señor, el descanso eterno. Brille para ellos la luz perpetua. Descansen en paz. Amén.

María, Madre de Dios, y Madre de misericordia, ruega por nosotros y por todos los que han muerto en el regazo del Señor. Amén.