Aseguran que uno de los delincuentes tenía un léxico similar a un funcionario de seguridad. Los golpearon con armas largas, mostraron una granada y los amenzaron con “dejarles los sesos pegados al vidrio” si no colaboraban
Capitán del equipo, Luirgy Erazo: “Fueron casi 3 horas de terror” | Foto: Jhonathan Raúl Segovia
Por: Jhonathan Raúl Segovia | El Pitazo – Trujillo
“Por momentos pensamos que estábamos muertos. Cuando nos paramos en Caracas no fue a calmarnos, sino a revivir lo que pasó. Los delincuentes hicieron todo muy bien; hoy no buscamos culpables, lo material se recupera”.
Esas fueron las palabras del capitán del equipo Trujillanos FC, Luirgy Erazo, quien detalló que 10 minutos antes del robo, los habían parado en una alcabala de la Guardia Nacional (GN), donde los funcionarios actuaban de manera sospechosa y les preguntaban por sus implementos deportivos. El delantero James Cabezas describió que los seis sujetos armados, que ingresaron al autobús oficial del equipo tras interceptarlos en un peaje abandonado, más adelante los sacaron a la calle “y los tiraron a la maleza llena de barro”.
“Ese es el riesgo de viajar de noche. Esto es parte de la situación que vive el país. Lo más traumático fueron las casi tres horas secuestrados. A mí me golpeaban con el arma en la cabeza”, señaló el colombiano.
Delantero James Cabezas: En el bus iban 30 personas | Foto: Jhonathan Raúl Segovia
El héroe
Para el director técnico de “los guerreros de la montaña”, Darío Martínez, el gran héroe fue el chofer: “Pudo sacar el autobús en retroceso y con las luces apagadas” de la carretera por donde los desviaron a kilómetro y medio del sector Boca de Uchire, estado Anzoátegui.
“Había uno que parecía funcionario. Hablaba en clave. Era delincuencia organizada y por teléfono pedían un jeep. Aplicaron mucho psicoterror, todo les molestaba, y se llevaron el 100% del material deportivo”.
Afortunadamente, lograron salvar dos teléfonos celulares, con los que pudieron comunicarse más adelante. Los dejaron descalzos y sin ropa a las 2:30 de la madrugada del pasado lunes 19 de septiembre.
Director Técnico, Darío Martínez: “Estamos preparados para perder, pero no para algo así” | Foto: Jhonathán Raúl Segovia
Destino
El equipo venía de Maturín, estado Monagas, tras perder 2 a 1 un partido del Torneo de Clausura 2016. Y aunque de ida les pagaron boletos de avión, de regreso tuvieron que emprender el viaje de 16 horas por tierra con destino a Trujillo, municipio Valera.
De acuerdo a declaraciones de los jugadores y cuerpo técnico víctimas del hampa en la vía, en el robo perdieron 42 celulares, gran cantidad de tacos valorados en 7.200 dólares en total, cámaras de prensa, balones, tablets, ropa, uniformes y pertenencias personales.
La directiva del equipo y el Gobierno de Trujillo se comprometieron a reintegrar las pérdidas de los implementos deportivos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario