El empresario valenciano, artífice de una las firmas más reconocidas en el mundo, fallece a los 91 años
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| José Lladro, en la terraza de su casa en 2010. |
José Lladró Dolz (Almàssera, 1928), uno de los cofundadores de la empresa de porcelana decorativa Lladró, ha fallecido este lunes a los 91 años de edad. El empresario valenciano creó junto a sus hermanos Juan y Vicente la firma Lladróen 1953 en la localidad valenciana de Almàssera.
La compañía fue durante años una de las firmas españolas más conocidas en todo el mundo por sus figuritas de porcelana, que conquistaron el mercado del lujo, con tiendas abiertas en grandes urbes como Londres, Los Ángeles o Nueva York. En esta últimas ciudad, Lladró inauguró en 1988 el museo y la galería Lladró.
El éxito de las esculturas Lladró en el mercado americano y ruso propició que en 1991 fuera expuesta una selección de las obras en el Museo del Hermitage. En 1992 estuvo presente en la Exposición Universal de Sevilla, y en 1995 se inauguró el centro Lladró en Madrid. A finales de 1999, la firma tenía más de 2.000 trabajadores repartidos en cuatro fábricas pero la sede se había establecido en Tavernes Blanques (Valencia).
José Lladró, en su autobiografía Pasajero de la vida, publicada en 2002, repasó algunos momentos de su vida y habló de los tres cofundadores de Lladró: "Juan es el más inteligente y el más artista; Vicente es muy sensato y yo, seguramente, el más ignorante y atrevido", dijo durante la presentación del libro.
Mediano de tres hermanos, hijo de agricultores, casado y con tres hijas, José Lladró es autor también de los libros El legado de Lladró y Luces y sombras, donde cuenta cómo construyeron y expandieron su imperio de porcelana y donde también reflexiona sobre la empresa familiar, una estructura cuyas fortalezas y debilidades conocía de primera mano el conocido empresario.
La época dorada de Lladró dio paso a otra más delicada a finales de la década de los 90. El imperio en torno a las prestigiosas figuritas, que encandilaron a medio Hollywood e incluso al cantante Michael Jackson, pasó a la segunda generación en torno a 2003 después de que Juan, José y Vicente Lladró Dolz, presidentes y fundadores, culminaran la cesión definitiva de la dirección a sus descendientes. La falta de entendimiento entre los herederos llevó unos años más tarde a la firma a replantearse su futuro.
Un grupo inversor mostró en 2016 interés por Lladró después de un proceso en el que los propietarios comenzaran a buscar a través de la consultora PwC compradores o inversores. A final de ese año, la firma pasó a ser propiedad del fondo PHI Industrial. José Lladró y sus herederas fueron precisamente los más críticos con la operación y apostaron por una salida que permitiese a la familia conservar una parte minoritaria de las acciones.
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