"Esto ocurre en un contexto que debemos tener muy presente, es una inflación muy alta, pero no hay crédito bancario. Es decir, ahora con el crédito reducido literalmente a cero, esto es que de cada 100 bolívares que depositan en el banco, esos 100 los toma el gobierno y el banco no puede generar crédito. Esas cifras lo que reflejan es una devaluación del signo monetario, solo en julio se depreció casi 50%, y esto se genera por el hecho de que la devaluación es todavía más agresiva", expuso Guerra a César Miguel Rondón.
La hiperinflación afecta la disposición de compra de los venezolanos, y como resultado se tiene la disminución de consumo un mercado donde comprar y vender en dólares (o al cambio correspondiente) se ha convertido en algo cotidiano.
Según los datos expuestos por La Comisión de Finanzas de la Asamblea Nacional, el índice de inflación correspondiente al mes de julio se fijó en 33.8% mientras que la inflación acumulada en lo que va de año representa el 1.579,5.
"Con este salario de hambre del gobierno usurpador de 40 mil bolívares. Hay que decir que no es que la hiperinflación se ha reducido, sino que desacelerado, el pueblo de Venezuela está pasando hambre, se consiguen productos pero son inaccesibles" declaró el diputado Alfonso Marquina, en sesión ordinaria.
"Hay que decir que no es que la hiperinflación se ha reducido, sino que ha desacelerado" expresó Guerra.
El parlamentario explicó en entrevista con el periodista César Miguel Rondón, que la dolarización en Venezuela es desordenada y caótica porque cada quien pone un precio, y como no es ordenado, "ves una dispersión de precios".
Sostuvo que la alta inflación está sucediendo en un contexto donde no hay créditos. "La devaluación de la moneda es lo que está generando la hiperinflación", aseguró.
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