. Giuseppe Palmisano: “No hemos podido viajar a Washington para hablar con la OFAC |
Las conversaciones sobre Tigres y Magallanes se detuvieron a causa del coronavirus, aunque se veía una luz al final del túnel
La temporada de la Liga Venezolana de Beisbol Profesional está en cuenta de dos bolas y dos strikes. La pandemia del covid-19 -que afecta a todo el mundo con muertes y millones de contagios- le hace una mala jugada a la liga, que no se ha visto interrumpida durante 74 años de existencia.
“Estamos contra el tiempo. Se necesita que se cambie todo el escenario con el tema del coronavirus, y la LVBP se tiene que alinear con el ente gubernamental para lo que será el protocolo de salud”, expresó Giuseppe Palmisano, presidente de la liga, en entrevista con Jhonn Pérez
Sin embargo el presidente de la liga criolla dejó claro que el gobierno solo apoyará a la LVBP entre lo que está en el margen permitido.
“Las sedes serían entre Barquisimeto y la capital para minimizar los riegos. Hay que alinearse con el Estado para poder estar en la misma página con el tema del covid-19 y así poder cumplir un protocolo para pedir las condiciones a la MLB”, dijo.
Agregó que esto es algo que escapa de sus manos y ve poco viable que la temporada se lleve a cabo si los casos de covid-19 siguen aumentando y exista restricción aérea.
Hasta este 18 de agosto se han registrados 35.697 casos positivos y la muerte de 296 personas. También hay un estado de emergencia que impide los vuelos comerciales y tiene fecha de retroactivo el 12 de septiembre.
“Sin los vuelos internacionales no podemos traer a nuestros jugadores, pertenezcan a una organización de MLB o a otra liga. Así no podemos brindarle al público el espectáculo que estamos acostumbrados a darles”, manifestó el presidente de la LVBP.
Concluyó: “No somos pesimistas, pero son factores que hay que tomar en cuenta”.
Los ocho equipos respaldan las medidas de la liga
Leones del Caracas, Navegantes del Magallanes, Tiburones de La Guaira, Tigres de Aragua, Caribes de Anzoátegui, Cardenales de Lara, Águilas del Zulia y Bravos de Margarita son las novenas que forman parte del circuito nacional y que no han podido reunirse para discutir lo que será la siguiente campaña.
En un comunicado de la LVBP expresaron: “Desde que se declaró la emergencia nacional sanitaria, debido a la aparición del covid-19 se ha afectado seriamente el normal desenvolvimiento de los procesos que se necesitan cumplir para ofrecer el acostumbrado espectáculo de calidad en las siete sedes que albergan a los equipos participantes”.
En palabras de Palmisano, “no hay una planificación para lo que sería la temporada 2021 porque el virus no ha permitido que las organizaciones puedan reunirse”.
Sin embargo, los ocho equipos se han mostrado unidos frente a este desafortunado caso y por segundo año consecutivo la zafra se ve en peligro.
En la temporada 2019-2020 la oficina de las Grandes Ligas les informó a sus organizaciones que no podían participar en la LVBP debido a que esta recibía dinero de Pdvsa, empresa está sancionado por la Oficina de Control de Bienes Extranjeros (OFAC).
Un hecho con el que tuvo que lidiar Palmisano y buscar empresas que desearan patrocinar a la LVBP, para no contar con el financiamiento de Pdvsa.
Sin embargo, en momentos en que las empresas no están produciendo como deberían a causa de la cuarentena por el coronavirus, se dificultará conseguir un patrocinador.
“La MLB salió a jugar por su estructura financiera. A nosotros se nos dificultará tocar la puerta a los patrocinadores porque no sabemos cómo van a responder”.
Se ve una luz al final del túnel con Tigres y Magallanes
Tigres y Magallanes son los únicos equipos que no podrán contar con jugadores, técnicos o personal de la MLB debido a que son fundaciones y un porcentaje les pertenece al Estado, que tiene gobernadores sancionados por la OFAC y que son adeptos al régimen de Nicolás Maduro.
Sin embargo, el presidente de la LVBP indicó: “Nos hemos reunido con las gobernaciones y están prestos a colaborar a lo que la liga indique; y bueno, todo esto de la pandemia ha detenido las conversaciones porque ellos están enfocados en la salud de las personas”.
De igual forma comentó que la prohibición de viajes comerciales ha sido un impedimento para ir a Washington y llevar los casos a la OFAC.
En la campaña pasada, cuando el veto fue levantado, solo seis equipos pudieron contar con los jugadores de las organizaciones de Grandes Ligas. Aunque ni los bengalíes ni los filibusteros pudieron reforzarse con sus peloteros de MLB.
Incluso los que pertenecieran a la MLB no podían jugar en el José Bernardo Pérez, hogar de Magallanes, ni en el Pérez Colmenares, casa de los Tigres.
En estos momentos la LVBP se encuentra en la novena entrada y está perdiendo el juego, necesitará una remontada histórica para llevar a cabo la campaña.
Dato curioso
De no llevare a cabo la campaña, sería la primera vez que sucede eso en 75 años de existencia de la Liga Venezolana de Beisbol Profesional. No obstante, en tres ocasiones se ha suspendido el torneo una vez comenzado.
La primera ocasión fue en 1959, cuando hubo un altercado entre Alejandro “el Patón” Carrasquel y el gerente de Pampero, que llevó a la suspensión de la zafra.
El primer venezolano en las Ligas Mayores tuvo un enfrentamiento con el gerente del equipo, Eduardo Moncada, y estos se fueron a las manos. La LVBP suspendió a Carrasquel por dos años, pero la Asociación de Peloteros amenazó con suspender la temporada, y Herman Ettedgui, que era presidente del circuito, decidió suspender la campaña.
La segunda ocasión fue en la campaña de 1973-74, por la huelga de peloteros convocada por Dionisio Acosta, presidente de la Asociación de Peloteros. Esta acción se debió a que los jugadores exigían una cuota por los derechos de televisión.
La tercera y última fue en 2002, por el paro petrolero que paralizó al país en una huelga contra el ex presidente Hugo Chávez.
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