馃敟 EL FRAUDE M脕S SONADO DE LA HISTORIA FINANCIERA DE VENEZUELA: EL CASO DE ORLANDO CASTRO LLANES Y EL GRUPO PROGRESO 馃敟
Pocos esc谩ndalos han marcado tanto la memoria colectiva venezolana como el colapso del imperio de Orlando Castro Llanes durante la crisis bancaria de 1994. Este caso no solo dej贸 p茅rdidas millonarias, sino que nos regal贸 una frase que hasta hoy se usa cuando alguien promete de m谩s: "Aqu铆 estamos y aqu铆 seguimos".
¿Qui茅n era Orlando Castro Llanes?
Un cubano que lleg贸 a Venezuela tras la Revoluci贸n y empez贸 vendiendo seguros puerta a puerta. De all铆 construy贸 un verdadero imperio: bancos, compa帽铆as de seguros, bienes ra铆ces, emisoras de radio y peri贸dicos. En su mejor momento empleaba a m谩s de 11.000 personas y era uno de los hombres m谩s ricos del pa铆s. Un "self-made man" que muchos admiraban y otros envidiaban.
El colapso en 1994
La crisis bancaria comenz贸 con la intervenci贸n del Banco Latino y r谩pidamente se convirti贸 en un efecto domin贸. El grupo de Castro recibi贸 auxilios financieros por cientos de millones de d贸lares entre junio y octubre de 1994. Pero en diciembre todo se derrumb贸: intervinieron el Banco Progreso y el Banco Rep煤blica por insolvencia, mala gesti贸n y presunto fraude. Las p茅rdidas para el Estado y los ahorristas superaron los 800-900 millones de d贸lares.
Orlando Castro huy贸 a Miami con una sola maleta, convirti茅ndose en uno de los "banqueros pr贸fugos" m谩s famosos de la 茅poca.
La frase que qued贸 grabada en la historia: "AQU脥 ESTAMOS Y AQU脥 SEGUIMOS"
En pleno caos, Castro sali贸 en televisi贸n en una agresiva campa帽a publicitaria. 脡l mismo aparec铆a mirando a la c谩mara y diciendo con voz firme: "Aqu铆 estamos y aqu铆 seguimos". Los empleados hasta llevaban escarapelas que dec铆an "Gente 煤til a su disposici贸n". El mensaje era claro: tranquilos, todo est谩 bien.
Semanas despu茅s… los bancos quebraron, Castro se fue y el imperio se hizo polvo. Esa frase se convirti贸 en el s铆mbolo perfecto del enga帽o y la falsa seguridad. Todav铆a hoy la escuchamos cuando alguien hace promesas vac铆as frente a una crisis evidente.
Consecuencias judiciales
En Venezuela fue acusado en rebeld铆a por fraude bancario y malversaci贸n.
En Estados Unidos lo arrestaron en 1996 junto a su hijo y su nieto. Lo condenaron por defraudar 55 millones de d贸lares a depositantes del Banco Progreso Internacional de Puerto Rico (m谩s 8 millones en Venezuela). Cumpli贸 25 meses de prisi贸n.
Regres贸 a Venezuela en 2007, intent贸 volver al negocio de seguros, pero ya sin el brillo de antes. Falleci贸 en Caracas en 2014 de un infarto, a los 88 a帽os.
Este caso, junto al del Banco Latino, sigue siendo el emblema de la crisis que dej贸 en la ruina a miles de familias y marc贸 un antes y un despu茅s en la banca venezolana.
¿Lo viviste? ¿Recuerdas esos comerciales? Cu茅ntanos en los comentarios 馃憞
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