POR RICK WARREN — ABRIL 1, 2024
“Traza un sendero recto para tus pies; permanece en el camino seguro”. Proverbios 4:26 (NTV)
Dios tiene un plan para tu vida, pero eso no significa que no debas hacer planes también. Él no quiere que vayas a la deriva, dejando que las circunstancias determinen la dirección de tu vida. Él quiere que seas intencional sobre el camino que elijas.
Aunque la Biblia da muchas razones para la planificación, aquí hay tres razones que son fundamentales.
- Dios hace planes.
Jeremías 29:11 dice: “Pues yo sé los planes que tengo para ustedes—dice el Señor—. Son planes para lo bueno y no para lo malo, para darles un futuro y una esperanza” (NTV).
Dios quiere que seas como Él. Entonces, si Dios hace planes, tú también debes hacer planes.
Pero hay una cosa que Dios no es: “Pues Dios no es Dios de desorden sino de paz” 1 Corintios 14:33 (NTV). ¿Tienes algún plan para el resto del año? ¿Los próximos 10 años? Si no has hecho ningún plan para tu vida, entonces es probable que tu vida esté fuera de orden, y no es así como Dios te creó para vivir.
- Dios espera que planifiques porque es beneficioso para tu vida.
A lo largo de las Escrituras, particularmente en el libro de Proverbios, la Biblia habla sobre el valor de planificar tu vida. Proverbios 4:26 dice: “Traza un sendero recto para tus pies; permanece en el camino seguro” (NTV). Esa es solo otra forma de decir: “Haz un plan”.
Dios te dice que planees porque no quiere que vivas una vida de confusión mientras te las arreglas cada día. La Biblia dice: “Asegúrense de que todo se haga de forma apropiada y con orden” 1 Corintios 14:40 (NTV).
- Dios no quiere que desperdicies tu vida.
La planificación es una cuestión de administración. Tu vida es un regalo de Dios para ti. Lo que hagas con tu vida es un regalo para Dios. Efesios 5:15-17 dice: “Así que tengan cuidado de cómo viven. No vivan como necios sino como sabios. Saquen el mayor provecho de cada oportunidad en estos días malos. No actúen sin pensar, más bien procuren entender lo que el Señor quiere que hagan” (NTV).
El viejo cliché es cierto: si estás fallando en planificar, estás planeando fallar.
Reflexiona sobre esto:
- ¿Cómo puedes ser más como Dios hoy en la forma en que haces planes para la próxima semana?
- ¿Cuáles son algunas barreras comunes que podrían impedir que alguien sea un planificador?
- ¿Crees que es posible planificar en exceso? ¿Cuándo hacer demasiados planes causaría tantos problemas como hacer muy pocos planes?
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